Luces de advertencia. Cada vez que se coloca la llave en el interruptor de ignición del auto y se lo gira, diversas luces en el tablero de instrumentos se prenden por unos segundos y después se apagan. Sin embargo, si se llega a notar que algunas de ellas se iluminan después de un tiempo o se mantienen encendidas, puede ser un indicio de que hay un problema en el motor. Las tres principales luces que se encienden son: Check Oil/Oil Level Low, Oil Pressure Low y Check Engine.
Manejo errático. El motor debe trabajar suave, con un manejo predecible y no tendría que agitarse, sacudirse, vacilar, acelerarse demás o detenerse en ningún momento. Si en realidad lo hace, es una fuerte señal que hay un problema. Tales comportamientos pueden ser indicios de bujías desgastadas, filtro o mangueras de combustible obstruidos, entre otras cosas. En estos casos, un mantenimiento preventivo como afinación, cambio de aceite o banda de distribución en periodos regulares pueden ayudar a prevenir que el propulsor se comporte de manera inadecuada.
Explota, golpetea, vibra y rechina. Un sonido de explosión puede ser el indicio de una detonación dentro de los cilindros del motor. En otros casos, un sonido de explosión o golpeteo puede ser falta de afinación al motor. Esto pasa generalmente en propulsores viejos o muy desgastados.
Por otra parte, un sonido de rechinido puede surgir cuando se intenta encender el auto, esto es seña de que el sistema de arranque necesita atención o un posible cambio. Asimismo, un ruido de golpeteo o vibración al momento de hacer los cambios de velocidades, puede ser indicio de un problema ya sea en el motor o quizá en la transmisión.
Con lo anterior no significa que el motor deba comportarse callado y silencioso del todo. Existen ruidos "naturales" que se pueden percibir en su operación cotidiana. Sin embargo, si se llega a escuchar algo raro no hay que dudar en revisarlo y darle atención inmediata.

No hay comentarios:
Publicar un comentario