Son los autos de la categoría de mayor potencia en el país, pero que brillaron por su ausencia en el Gran Premio Integración del Oriente, que concluyó el domingo y que fue de la modalidad ruta. El único piloto de la N-4 que compitió fue Luis Barbery, que terminó ganando la tradicional prueba. El resto no corrió porque le significaba un mayor presupuesto que el sistema rally, que fue el utilizado en 2009 en el GP.
“Mientras se siga compitiendo en esta modalidad, no voy a correr el Integración”, sostuvo Eduardo Peredo, actual campeón nacional de rally y que, además, participa en el Campeonato Sudamericano de Rally (Codasur). La decisión de ‘Happy’, ganador del Integración de 2007, tiene que ver con varios aspectos, como el hecho de que los N-4 gastan unos $us 15.000 para competir en el Gran Premio en ruta, monto que baja a unos $us 9.000 si la carrera fuera de rally. Pero no sólo eso, pues los coches tienen tanques de gasolina para 60 litros, que no alcanzan para terminar una etapa actual que supera esa distancia. “Además de eso, se tiene que modificar la electrónica y gastar más en llantas, pues necesitamos el doble de lo normal”, sostuvo Roberto Saba, que casi siempre es protagonista de las pruebas departamentales. Otro de los afectados es Juan Carlos Salvatierra, que está de acuerdo con que se corra ruta, pero que sean menos días de competencia. “Para prepararse para una Integración son unos 20 días que uno tiene que dejar su trabajo y acá nadie vive de las carreras”, sostuvo ‘Chavo’, que lidera el campeonato departamental de rally de este año.
Por lo informado por Adecruz, en 2011 el GP Integración del Oriente seguirá siendo de ruta, decisión que impediría nuevamente que participen los pilotos de la N-4, que en su mayor parte son de punta.
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