11 enero 2013

Fue una etapa muy difícil para los pilotos nacionales



Hubo final feliz ayer para Juan Carlos Salvatierra y Marco Bulacia en Arica, aunque no todo fue color de rosa para los bolivianos durante la quinta etapa que se inició en Arequipa. Por un problema en la bomba de su vehículo, Bulacia partió con más de una hora de retraso, lo que con seguridad le originará una penalización de la organización, como él mismo lo admitió; pero en el resto del trayecto no tropezó con ninguna dificultad.

También el Chavo tuvo problemas, pues el polvo que causó la máquina de un competidor que iba por delante le perjudicó la visibilidad y cayó con su moto sobre él, aunque fue un incidente sin ninguna importancia.

Bulacia, el único sobreviviente de los tres bolivianos que iniciaron la carrera en auto, pese al percance se mostró feliz con el desempeño que tuvo en la quinta etapa, aunque creía que iba a resignar algunos lugares en la general respecto de la ubicación del martes, escaló dos posiciones y se ubica en el lugar 70.

“Empezamos mal, porque tuvimos problemas con la bomba, nos demoramos en repararla; pero luego todo estuvo bien”, reiteró Bulacia y además apuntó que “vamos a estar penalizados”. La página oficial de la competencia, sin embargo, no registró ninguna sanción para el boliviano.

El Chavo quedó sorprendido con la complicada etapa, aunque en la previa pensaba que no iba a tener complicaciones. “Hoy (por ayer) fue una prueba bastante difícil, muy técnica. La verdad que todos los pilotos esperábamos una etapa más fácil, porque eran solamente 130 kilómetros de especial; pero resultó ser de las más complicadas”.

Contó que se encontró con muchas piedras en el camino; además “nos tocó subir cerros, que también estaban llenos de piedras, fue muy difícil”. Después señaló que “había el famoso fesch fesch (tierra suave, parecida al talco), que en varias partes estaba muy profundo”.

Los mayores problemas para el Chavo aparecieron cuando estaba por alcanzar a un piloto; “pero lastimosamente me quedé envuelto en el polvo que levantaba su máquina, no podía ver bien el camino, me caí y por un rato quedé debajo de la moto”. El accidente no tuvo ninguna consecuencia para la moto ni para su físico y pudo continuar la etapa hasta llegar a Arica.

No obstante los minutos perdidos, llegó bien posicionado en la etapa, en el puesto 34, y también pudo mejorar en la clasificación general de la competencia, pues escaló hasta el lugar 51. “Pese al percance, igual pude subir posiciones, así que estoy muy feliz”, dijo emocionado. No obstante de que tras la segunda etapa quedó muy rezagado, expresó que “son solamente cinco días de carrera y falta mucho camino por correr”.

Dominio francés en las motos

Podio ‘galo’

En motos, la jornada fue redonda para los franceses. La etapa ganó David Casteu (Yamaha), secundado por su compatriota Olivier Pain (Yamaha), que mantiene por segundo día el liderato de la carrera. Cyril Despres (KTM) fue quinto y sigue bien situado para revalidar el título del año pasado. Es tercero en la general, a 6 minutos de Pain.

En autos

El francés Stephane Peterhansel comanda la general en vehículos con casi diez minutos de ventaja sobre el catarí Nasser Al-Attiyah. Más atrás, a más de media hora, aparecen De Villiers, el ruso Leonid Novitskiy y 'Nani' Roma.

Sexta etapa

La etapa de hoy, sexta de la competencia, entre Arica y Calama, supondrá el regreso de los pilotos al desierto de Atacama, el más árido del mundo. Será larga, con 768 kilómetros, 455 de ellos cronometrados. El primer tramo será de dunas y el temido fesh-fesh. La etapa se neutralizará durante cerca de 100 kilómetros y la parte final transcurrirá por caminos pedregosos.

Campamento de Arica, tomado por bolivianos

Los pilotos bolivianos fueron locales ayer en Arica. Por lo menos unas 100 personas, de diferentes partes del país, se encargaron de darles una bienvenida de héroes a Juan Carlos Salvatierra y Marco Bulacia, aunque se quedaron con las ganas de ver a Diego Martínez, quien hasta el momento en que la mayoría se retiró del lugar (19.30 hora boliviana), no había llegado al campamento.

Salvatierra fue el primero en aparecer en el gigante predio, muy cerca del aeropuerto y a unos ocho kilómetros de la ciudad. Mucha gente se reunió en el lugar, pero los bolivianos fueron lo más bulliciosos y la bandera rojo, amarillo y verde tuvo fuerte presencia en varios lugares del pasillo que se hizo, cercado por vallas y guardias de seguridad.

“Chavo, Chavo…”, gritaron y el motociclista se acercó, aunque el contacto con los aficionados fue breve porque debe cumplir la norma de la organización. La ceremonia se repitió cuando pasó por el lugar Marco Bulacia en su camioneta. Desde el interior saludó a los presentes, quienes también corearon “Bulacia, Bulacia, Bulacia...”.

Por lo menos una hora después, los dos pilotos coincidieron en el ingreso al campamento y otra vez se desató la algarabía. El aliento para ambos fue importante, sus nombres se volvieron a escuchar y se sumó el grito unánime de “Bolivia, Bolivia…”, lo que originó la sorpresa del público local que quedó sorprendido por la importante cantidad de gente del país que llegó hasta el lugar.

Los dos se tomaron fotos con la gente y firmaron autógrafos. Después se fundieron en un cariñoso abrazo, que fue festejado por los compatriotas, y también se dieron tiempo para apoyar a los periodistas del país.

Bulacia agradeció personalmente a la gente presente y también a los muchos bolivianos que observaron el paso de los vehículos durante el recorrido, antes de llegar a Arica. “Agradezco a todos los amigos que nos están siguiendo, a los medios de comunicación bolivianos que están haciendo el esfuerzo de seguir de cerca lo que hacemos, es muy emocionante”. También el Chavo agradeció el apoyo y las muestras de cariño.

No hay comentarios:

Publicar un comentario