El automovilismo dará mañana un gran paso hacia un futuro más respetuoso con el medioambiente con el inicio del nuevo campeonato de Fórmula Eléctrica, creado por la Federación Internacional del Automóvil (FIA), con la disputa del Gran Premio de Beijing.
Desde su elección como presidente de la FIA Jean Todt apoyó la iniciativa francesa, en un principio conocida como ‘Formulec’, de crear una competición de monoplazas 100% eléctricos.
Pasaron los años y mañana se situarán 20 vehículos Spark-Renault SRT-01 idénticos en la parrilla de salida del primer ‘Gran Premio Eléctrico’ de la historia, en China, un país en el que el mercado automovilístico vive un crecimiento exponencial en los últimos años.
Evidentemente sin el prestigio de la Fórmula 1, la nueva competición se ha nutrido de muchos pilotos que han estado de alguna manera ligados a la categoría reina.
De esta forma estarán los hijos de los legendarios Alain Prost y Nelson Piquet; Nicolás y Nelson Jr, además del sobrino de Ayrton Senna, Bruno.
También competirán otros pilotos conocidos como los de los españoles Jaime Alguersuari y Oriol Servía, el alemán Nick Heidfeld, el italiano Jarno Trulli o los franceses Charles Pic y Franck Montagny.
Sobre el papel, los dos máximos candidatos son el suizo Sebastien Buemi y el brasileño Lucas di Grassi, que defenderán los colores de Toyota y Audi respectivamente, después de haber competido para Toro Rosso y Virgin en Fórmula 1.
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