La subfacturación de los vehículos que salen de Iquique hacia el país afecta los ingresos fiscales tanto de Bolivia como de Chile, opinó el abogado chileno Pedro Véliz. Ejecutivos de la Zona Franca Industrial de Iquique (Zofri) creen que la Aduana Nacional tiene todos los instrumentos para efectuar los controles.
Página Siete verificó, en un recorrido por ZOFRI, que los dueños de los diferentes negocios dedicados a la venta de automóviles, electrodomésticos y televisores ofrecen incluir en la factura un precio inferior al bien.
"La subfacturación perjudica tanto a la recaudación fiscal chilena como a la recaudación fiscal boliviana”, afirmó Véliz.
Explicó que en el caso boliviano la presentación de facturas con un valor irreal afecta al Estado porque recibe menores ingresos por la importación de estas mercancías. "Va a afectar a la recaudación, a la importación fiscal boliviana, porque va a recaudar menos impuestos de los que podría haber recaudado si es que la operación se hubiera hecho con los valores reales”, remarcó.
La presidenta de la Aduana Nacional, Marlene Ardaya, señaló que la subfacturación afecta más a Chile y que hay al menos seis métodos para verificar el valor. Además, recordó que no hay exclusividad de marca.
En Chile, el artículo 97 numeral 4 del Código Tributario establece que "cualquier maniobra dolosa, maliciosa, fraudulenta tendente a rebajar la base imponible es constitutiva de un delito”.
"Mediante la subfacturación se disminuye la base real del impuesto que debería pagar la empresa, porque está declarando menos utilidades de las que realmente obtuvo y si declaró menos utilidades probablemente haya una rebaja maliciosa de la carga tributaria a entrar”, dijo.
El presidente de la ZOFRI, Patricio Sesnich, dijo que la Aduana boliviana acata las normas de la Organización Mundial de Comercio (OMC) y tiene todas las herramientas para ajustar el valor de una mercancía, en caso de que la facturación originada en Chile sea menor al monto real.
"Es para no perjudicar a las empresas instaladas en Bolivia, porque eso en el fondo es una competencia desleal para el comercio establecido, pero (la Aduana) tiene las herramientas para hacerlo”, destacó.
El presidente de la ZOFRI remarcó que la instancia pertinente para verificar la veracidad de esas facturas es Impuestos Nacionales y la Aduana chilena.
Las empresas instaladas en Zofri contribuyen al Estado con el 17% de sus utilidades y si se emiten facturas subvaluadas se genera un déficit. La pena por este delito en Chile es de tres años de cárcel y más.
Para el abogado Véliz, ésta es una práctica indeseada e ilegal.
"Afecta a la recaudación fiscal y atenta contra otros bienes jurídico protegidos como la libre competencia, en general los derechos económicos”, aseguró el abogado chileno.
Iquique En la Zofri, la mayoría de las empresas que venden vehículos y que están a cargo de empresarios chilenos y pakistaníes ofrece motorizados con una factura subvaluada, para que una vez que ingresen a territorio boliviano paguen menores impuestos.
Mecanismo Hay dos formas de subfacturación: la directa, cuando la empresa que vende el automóvil accede a emitir una factura por un valor inferior al real del coche; la segunda se produce bajo el mecanismo de traspaso, que consiste en que otra empresa de trámites se encarga de hacer el documento subvaluado sin la participación del vendedor.
Arce: Aduana debe evitar la subfacturación de vehículos
El ministro de Economía, Luis Arce, afirmó que hay los controles para evitar la subfacturación y que la Aduana Nacional de Bolivia (ANB) es la encargada de verificar el valor de la mercadería que ingresa, en este caso, de los coches de Iquique.
Sin embargo, una investigación de Página Siete reveló que comerciantes introducen vehículos con facturas que sólo muestran la mitad del valor real para pagar menos impuestos.
"La Aduana tiene la obligación de hacer la comparación (de la factura) con lo que tiene (mercadería). Por eso, muchos importadores se quejan, dicen pagar sus impuestos, pero se detectó que la mercadería está subvaluada. Además, no se acepta cualquier factura, hay controles. La Aduana sabe y tiene su sistema de valoración para verificar el valor de un vehículo y tiene que ver el año, modelo, país de procedencia y otras cosas”, dijo Arce en la red televisiva Cadena "A”.
La subvaluación de una factura consiste en que el vendedor de un motorizado hace un convenio con el comprador para poner en la factura una cantidad inferior al valor de la transacción real, para pagar menos impuestos en Bolivia.
Por ejemplo, un Nissan Caravan con 2.000 de cilindrada cuesta 14.000 dólares, pero el vendedor ofrece una factura con un importe de casi la mitad del precio real.
Al respecto, Arce aclaró que "esas facturas no son confiables. Es diferente cuando la factura viene del origen de producción. Ahí es mucho más confiable la factura”.
Sin embargo, agregó que en todos los casos existe un control de la Aduana hacia esas importaciones y que tiene "una base de datos” de los precios internacionales y depende de ello que se acepte o no la factura.
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