Los propietarios de vehículos pueden evitar el robo de su motorizado o de las autopartes, implementando determinadas medidas de seguridad que impidan a los auteros perpetrar este delito, aconseja la Dirección de Prevención de Robo de Vehículos (Diprove).
Una de esas medidas es la instalación de una alarma de seguridad, que permita al propietario estar atento cuando alguien toque el vehículo que deja estacionado en la calle o al interior de su domicilio.
Hacer un bloqueo eléctrico en el sistema del vehículo cuando está estacionado es otra opción válida, según la Policía. De esta manera, los delincuentes no pueden trasladar el motorizado a ninguna parte.
Otra medida que la Policía recomienda implementar a los conductores es marcar las autopartes de los vehículos con alguna pintura o figura en un lugar no muy visible. Esta marca permitirá, una vez que la autoparte sea recuperada en el mercado ilegal, ser reconocida por su propietario.
El director de Diprove, coronel Henry Terrazas, señaló que para prevenir los robos se debe evitar estacionar el vehículo en la calle, aunque se trate de una zona céntrica, y menos en horas de la noche.
PÓLIZA
Una de las principales medidas que se debe tomar en cuenta, en caso de optar por la compra de un implemento a medio uso, es la existencia de la póliza.
Las autopartes usadas, que son comercializadas en el mercado legal, vienen con una póliza de importación, por lo que al momento de la compra el interesado debe sacar una copia de la misma y tener el sello de la tienda de la cuál las adquirió, como respaldo ante cualquier eventualidad.
Según los comerciantes de autopartes usadas “es fácil” diferenciar un accesorio nacional del japonés.
El vicepresidente del Sindicato 23 de Marzo, Eloy Espíndola, explicó que las autopartes importadas tienen un olor especial y el polvo que presentan es arenoso y queda impregnado.
En cambio, las autopartes de vehículos robados en Bolivia están casi siempre libres de manchas o polvo, indicó el dirigente.
La venta de repuestos ilegales en el mercado informal puede ser también identificada porque los comerciantes de este tipo de accesorios no emiten factura.
NO NEGOCIAR
CON EL LADRÓN
Sea cual sea la autoparte robada, si es encontrada en el mercado ilegal el propietario no debe negociar con el ladrón. El procedimiento que corresponde es sentar una denuncia en la Policía para poder identificar y detener a las personas que se dedican a esta actividad.
Una de las autopartes robadas más valiosas, que deja sin funcionamiento al vehículo y que solamente puede ser comprada de la persona que realizó el robo, es el cerebro del vehículo (que es la identidad de un motorizado en el sistema eléctrico) .
Según la Policía, cerca del 90 por ciento de las personas víctimas del robo del cerebro de sus automóviles es contactado por los mismos delincuentes que sustraen esta autoparte.
La Policía recomienda no comprar ningún otro cerebro del mercado local, pues no será útil para el vehículo, sino es el mismo que le robaron.
MERCADO LEGAL
Otra de las recomendaciones de la Policía, para que los propietarios de vehículos eviten problemas, es que adquieran las piezas que requieren del mercado legal, donde se emiten facturas y se pueda hacer reclamos en caso de fallas en la pieza.
“Esto no solamente disminuirá el crecimiento del mercado informal, sino que dará seguridad a toda la población para que los robos reduzcan”, informó.
Ayuda de la Policía para la adquisición
Al momento de realizar la compra de un vehículo o de una autoparte de alto valor, los propietarios pueden solicitar ayuda a los policías de Diprove.
Luego de una revisión del vehículo, los efectivos pueden garantizar al interesado si el motorizado y sus accesorios están en orden y son comercializados de manera legal.
Riesgos al comprar autopartes usadas
Las personas que compran autopartes usadas corren varios riesgos.
Entre ellos, que el implemento tenga solamente unos meses de funcionamiento.
Otro de los riesgos es que la Policía identifique que la autoparte comprada es robada o pertenece a otro vehículo. En ese caso se hace el decomiso de la pieza.
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