Saber a tiempo que algo "anda mal" con el automóvil puede evitar terribles daños o accidentes. El color del humo que expulsan los vehículos es un detalle al que normalmente no se le presta atención, pero en definitiva resulta vital. Presentamos algunas de las "alertas" más comunes y sus posibles causas, según indicaron los técnicos de la empresa Autobol.
Humo blanco. Si se lo observa con frecuencia, posiblemente puede estar derritiéndose el refrigerante (anticongelante) en el interior de la cámara de combustión, en este caso no es humo sino vapor generado por ese pequeño problema.
Humo gris. Es generado por la falta de combustible y exceso de aire en el motor, el motor necesita más combustible y no existe equilibrio entre la mezcla de aire y gasolina suficiente para su buen funcionamiento.
Humo negro. Este color se presenta porque el automóvil está consumiendo más combustible de lo normal, cualquier falla que sea está directamente relacionada con el consumo excesivo de combustible y requiere una solución urgente.
Humo azul. Si observa este color hay que llevar el vehículo inmediatamente al taller ya que el motor está quemando aceite y si esto ocurre requiere una reparación inmediata y completa.
Emisores de contaminación. Los principales emisores actuales de partículas y NO2 son los vehículos, sobre todo los de motor diesel, que contaminan como diez de gasolina y en la última década no han parado de aumentar. Las concentraciones más altas de contaminantes, las más nocivas para la salud, se localizan en torno a las vías de gran circulación de vehículos, las autopistas, las rondas y las circunvalaciones, pero también en los centros de las ciudades. En Santa Cruz todavía no se tienen cifras alarmantes sobre estas emisiones, pero lo mejor es prevenir.
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