¿La ventanilla no se levanta?

Algunos problemas que aparecen en el vehículo, con los días se vuelven hasta fastidiosos. Por este motivo es de gran ayuda aprender a solucionar los pormenores que surgen de vez en cuando, como pinchazos, raspaduras o, incluso, cuando un vidrio de la ventana no se levanta. Ojo que este es un problema tan común como cualquier otro. Por este motivo El Sol y la gente del taller Vardona te dan algunos consejos para solucionar este tipo de inconvenientes.

Se empieza a desmontar. Lo que se hace primero es retirar el panel de la puerta para acceder al sistema mecánico de la ventana. En la mayoría de los vehículos se logra quitando los tornillos de detrás de la manija de la puerta interior y tirando del panel para desacoplar los remaches de presión de plástico. Con las ventanillas manuales se quita el tornillo que sujeta la manivela a la montura de la ventana. Una vez que el panel está desactivado habrá aberturas en la chapa para acceder a la polea de la ventana y a la manivela.

Vidrio desencajado. Se revisa la posición del cristal de la ventana dentro de la pista. Si el vidrio se ha desplazado de la pista o se inclina hacia un lado es probable que no se levante correctamente. Las pistas pueden haberse aflojado por el paso del tiempo y puede ser necesario apretarlas para que el vidrio encaje correctamente.

Se reemplaza si hace falta. En las ventanas manuales hay que comprobar el funcionamiento de la manivela y su conexión al mecanismo. Si al mover la manivela no se mueven estos brazos mecánicos, la ventana no se levantará. Normalmente, el sistema de poleas deberá ser reemplazado completamente cuando una de sus partes mecánicas falla.

En el caso de que sea eléctrico. Para los que cuentan con sistemas eléctricos, se verifica el fusible y el circuito de cableado del motor, incluyendo el interruptor de funcionamiento. Cualquiera de los puntos en el sistema eléctrico puede fallar y evitar que la ventana se mueva. La batería puede estar muerta o el motor del automóvil no puede ser activado, ya que algunos vehículos requieren para la operación de la ventana. El motor puede fallar después de años de uso continuo y se sustituye al desconectar sus cables a la clavija del adaptador y desempernarlo.

Por último. Se saca el vidrio de la ventana, si no se lo puede mover. La tierra o el polvo pueden tener al vidrio inmóvil en su lugar, del mismo modo que lo hace la cola vinílica y los adhesivos. Eliminar o descongelar el bloqueo permitirá mover la ventana.

Si bien este parece ser un trabajo complicado, reservado principalmente para los técnicos, los usuarios con un mínimo conocimiento de mecánica o de electrónica también pueden darle una solución al problema, siguiendo estos sencillos pasos y sin llegar a complicarse la vida ni gastando una suma importante de dinero.