Entre los inconvenientes más comunes del motor están la quema y fuga de aceite. Una solución para reducir estas fallas es la aplicación de aditivos, que aunque tarda un poco en hacer efecto, logrará resultados importantes.
Si bien es cierto, los aditivos ayudan a alargar la vida útil del aceite, no debe abusar de estos por dos razones fundamentales: primero, nunca van a ser un suplemento del aceite, sino más bien un complemento, y segundo por el alto costo que pueden tener en el mercado.
Entre las ventajas adicionales de usar los aditivos podemos encontrar una mejor en el rendimiento del motor, tanto en consumo de gasolina como en potencia (claro que el motor debe tener sus servicios al día) y filtros de aceite más limpios.
Existen 4 diferentes tipos de aditivos en el mercado.
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